La familia es un sistema humano en constante cambio, lo que influye de forma permanente y reciproca en los miembros que la conforman.
La terapia familiar aborda los problemas que se presentan en la interacción familiar. Puede ayudar a mejorar las relaciones problemáticas con el cónyuge, hijos u otros miembros de la familia. Es un tipo de terapia psicológica (psicoterapia) cuyo objeto es ayudar a los miembros de la familia a resolver conflictos, mejorar la comunicación y aprender a resolver futuras dificultades.
La terapia familiar resuelve problemas generados en el seno de la familia: problemas de comunicación entre sus miembros; violencia intrafamiliar; integrantes alcohólicos, dependientes o depresivos; problemas matrimoniales, incluidas la separación y el divorcio; problemas con límites y pautas educativas en niños pequeños o adolescentes; crisis familiares, como la pérdida de uno de sus miembros o el afrontamiento de enfermedades crónicas; problemas laborales; cambios de lugar de residencia; etc.
A las sesiones de terapia familia asisten los miembros de la familia.